Debido al fuerte oleaje, las autoridades sólo buscarán por aire y tierra el último cuerpo que falta por encontrar de los seis pasajeros que viajaban en el helicóptero de la Guardia Nacional accidentado la semana pasada.

Nino Correa, coordinador del operativo de rescate, señaló que el plan es monitorear la costa y sobrevolar el mar cada tres horas.

"El mal tiempo dificulta las operaciones para poder llegar hasta donde presumimos que podamos dar con él", manifestó en entrevista radial sobre el cuerpo del piloto Carlos Acevedo, que se cree pudiera estar pillado dentro de la cabina del avión.

En el helicóptero que se dirigía hacia un operativo antinarcóticos en Vieques, viajaban cuatro miembros de la Guardia Nacional y dos fiscales del Departamento de Justicia.

"Vamos a mantener durante estos cinco días un plan de monitoreo en las costas de Luquillo, Río Grande y Loíza, que es a donde siguen llegando piezas del helicóptero", añadió.

No descartó entrar al agua si las condiciones así lo permiten.

"Si por alguna razón vemos algunas probabilidades que podamos entrar la Marítima al ráea, también lo vamos a estar haciendo", precisó