Isaac se lleva $247 millones sin pisar a PR
En sólo dos días se han dejado de generar cerca de $247 millones en Puerto Rico, entre el sector privado y el gobierno, debido al paso de la tormenta tropical Isaac.
De acuerdo al economista José Alameda, el cierre del gobierno y la paralización parcial de la empresa privada tuvo un costo ayer de $93 millones y en el día de hoy el estimado es de $154 millones.
'De dónde emanan estos daños? No surge de daños a infraestructura, son más bien en servicios de producción. Qué significa esto y cómo se mide? Bueno, nosotros en la economía tenemos cifras de la Producción Nacional y de Ingreso Nacional, que lo que están midiendo es la producción de los servicios que realiza una economía en un año dado y lo que sería a través del flujo de producción de servicios o de bienes producidos. Por lo tanto, cuando tu cierras el gobierno o cierra la empresa privada pues ese día de producción se pierde', explicó el economista a NotiCel.
Alameda estableció que el ingreso nacional que se proyecta este año surge de la producción de $60 mil millones. De estos, $50 mil millones son del sector privado y el restante del gobierno central, excluyendo a los municipios.
Al aquilatar los $247 millones en pérdidas por el paso de Isaac, asegura que $199 millones o lo mismo que el 80 por ciento de los daños son de la empresa privada y $48 millones del Gobierno (incluyendo a los Municipios).
Ante este cuadro el impacto de estas pérdidas a la economía de Puerto Rico, 'no representa gran cosa, fíjate no es un daño significativo, es una reasignación de recursos que surge precisamente de un fenómeno natural que Puerto Rico siempre esta expuesto'.
Alameda indicó que precisamente al Puerto Rico estar expuesto a este tipo de evento climatológico por su ubicación geográfica, lo que se trata en estos eventos es mitigar daños a la economía.
Sostuvo que usualmente el efecto mayor es cuando hay problemas con la infraestructura, por ejemplo la interrupción del servicio de electricidad o de agua potable.
'Lo malo aquí siempre es los daños a los ser humano, por muertes o daños permanentes, que son mas difíciles de estimar. El valor humano o sentimental de un padre o un hijo no tiene valor', observó.
De mañana persistir el cierre gubernamental, aunque el sector privado retorne a la normalidad, Alameda dijo que se añadirían otros $24 millones, o sea que al final de la semana el impacto por los tres días de paralización del país representaría al menos $271 millones.
Este no pudo comparar si los daños de Isaac sobrepasan los $50 millones de Emily y los $250 a $300 de Irene, pues recordó que el valor de la producción es considerado en base a los precios de cada año.
'Ahora tenemos precios diferentes, posiblemente más altos, casi siempre. Más o menos la tasa inflacionaria crece entre un 2 o 3 por ciento, por lo tanto cada año hay que añadir 2 y 3 por ciento a los precios', determinó.
Para Alameda hay que tomar en cuenta que aunque todo vuelva a la normalidad mañana es difícil recuperar las ganancias pérdidas, porque lo que los ingresos que se genere mañana es lo que típicamente se obtendría ese día y no los preexistentes.
Entretanto, reiteró que hay que esperar a que surja el evento para poder pronosticar los efectos, si alguno, a la agricultura y la infraestructura por las inundaciones.
A su vez la economista Martha Quiñones, expresidenta de la Asociación de Economistas de Puerto Rico, manifestó que al cálculo de Alameda hay que añadirle $100 millones por los dos días, del efecto multiplicador de los cierres ante el paso de Isaac, que va desde los padres que tuvieron que faltar a sus trabajos porque no tenían quien les cuidara a sus hijos ante la suspensión de clases; hasta las compras de comida, medicamentos y provisiones a ultima hora por parte de los ciudadanos; entre otros imprevistos no planificados.
Para Quiñones el gobierno sigue fomentando esa deficiencia del manejo de las finanzas en los ciudadanos al adelantar el pago de las ayudas gubernamentales, como por ejemplo los cupones, ante situaciones como estas.
'Si vamos a estar desarticulando la economía continuamente, vamos a tener más pérdidas. Y si el gobierno cada vez que viene una tormenta tropical va a reaccionar así, pues estamos mal, porque entonces estamos desarticulando toda la economía a base de las tormentas tropicales, no de los huracanes', sentenció Quiñones.
Al mismo tiempo que añadió que 'el problema es que ellos (el gobierno) actúan así posiblemente motivados para desviar la atención hacia la tormenta tropical, pero no piensan que esto tiene efectos. A largo plazo, si un inversionista ve como actúa el Gobierno y como actúa la gente en Puerto Rico, los inversionistas no van a venir a un país que tiene tanta desarticulación, que no puede responder apropiadamente a un evento simple, que es una tormenta tropical'.