Washington salva de la pena de muerte a Aurea Vázquez y familiares
La fiscalía federal notificó el lunes en la noche que el secretario de Justicia federal les instruyó a no buscar la pena de muerte en el caso del asesinato del canadiense Adam Anghan Ulster, por el cual están acusadas la viuda Aurea Vázquez Rijos, su hermana Marcia y el esposo de esta Jose Ferrer Sosa.
Esta determinación sería una movida clave para que Aurea, quien está actualmente detenida en España, pueda ser trasladada a la Isla para enfrentar juicio por el asesinato de su esposo. Ese juicio, sin embargo, ahora sólo conllevaría una pena máxima de cadena perpetua en vez de la originalmente intencionada pena capital.
La fiscalía aclaró en el aviso que tampoco producirá acusaciones enmendadas en este caso.
El anuncio responde directamente a las dudas que expresó recientemente el juez federal Daniel R. Domínguez sobre las probabilidades de que el caso fuera certificado como uno de pena de muerte, y a su orden de que la fiscalía federal local procesara de manera expedita la consulta en Washington sobre si el caso sería certificado o no.
Marcia y Ferrer están también encarcelados. El otro hermano de Aurea, Chalbert, también fue acusado pero por delitos no directamente relacionados a la comisión del asesinato, y fue dejado en libertad bajo fianza el 27 de junio pasado.
Aunque Áurea es la sospechosa principal del crimen, Marcia y Ferrer Sosa, también enfrentan cargos por conspiración debido al uso de celulares, un medio interestatal, para planificar el asesinato en el Viejo San Juan del empresario millonario, de quien Áurea se iba a divorciar debido a que venían confrontando problemas –que supuestamente incluían violencia- en su relación.
Antes de que eso sucediera, Alex 'El Loco' Pabón Colón fue contratado para cometer el asesinato, por el que iba a recibir $3 millones. Nunca recibió el dinero, aunque insistió en el pago por medio de cartas en varias ocasiones. Pabón es ahora el principal testigo contra Vázquez y sus parientes.