Tras la protesta de una madre la semana pasada por la construcción de una farmacia Walgreens en Hatillo, la gerencia de dicha cadena negó, en declaraciones escritas, que tenga un monopolio en la Isla.

En un acto difundido principalmente por Facebook, la ambientalista Christina Victoria Pasquinucci ocupó el jueves los terrenos de un Walgreens en construcción en el pueblo de Hatillo junto a sus dos hijos, en una protesta por 'alta concentración que tienen estas farmacias extranjeras en la isla'.

Pasquinucci se instaló en los terrenos en construcción con el objetivo de paralizar la obra, intención que abandonó cuando se le amenazó conque le removerían a sus hijos. La joven objetó que a sólo cinco minutos del lugar se esté construyendo otra farmacia de la misma empresa multimillonaria, lo cual entiende representa una amenaza directa a la economía local de las pequeñas farmacias.

El director de Asuntos Regionales para Walgreens Puerto Rico, Edwin Rodríguez argumentó que 'no es correcto señalar que existe un monopolio, ya que en Puerto Rico la mayoría de las recetas son despachadas en las farmacias de la comunidad'.

'En la Isla hay alrededor de un millar de farmacias, de las cuales unas 715 (78%) son farmacias de la comunidad y unas 197 (22%) son farmacias de cadenas', añadió a la vez que subrayó que la empresa genera en la Isla unos 5,000 empleos y que su aportación a la economía es 'significativa'.

La protesta de Pasquinucci provocó ecos en propietarios de farmacias de la comunidad en Hatillo, una de las cuales comentó a NotiCel que de la venta de fármacos, prácticamente ya no obtiene ninguna remuneración.

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