Erika activa vigilancia sobre el grave problema de vivienda en P.R.
Los fenómenos atmosfericos pueden revelar muchas cosas sobre un país, en particular aquellas debilidades que preferirían ser ignoradas. En el caso de Puerto Rico, una de las alertas más graves que activó la tormenta es el estado de vulnerabilidad en que viven miles de sus ciudadanos y ciudadanas.
Así ha quedado constatado durante el paso de la tormenta tropical Erika a pocas millas de distancia de Puerto Rico. En su evaluación de las zonas de riesgo, las brigadas de manejo de emergencias municipales refirieron al Departamento de Vivienda decenas de casos de personas, principalmente mayores, que viven solas, en zonas de riesgo, cercanas a cuerpos de agua, en casas frágiles, sin mantenimiento, ni otras cosas básicas.
El secretario de Vivienda, Alberto Lastra, informó a las 5 de la mañana del viernes que habían 265 refugiados, una cifra muy baja para las miles de personas que viven en condiciones infrahumanas o en situaciones de riesgo en Puerto Rico.
Las cifras hablan por si solas: son tres mil personas sin hogar; 100 mil familias que viven con otros familiares sin un espacio propio adecuado; 30 mil en lista de espera para vivienda pública; y 2.5 mil en lista de espera para Sección 8.
Ante este panorama, Lastra indicó que se ha adoptado política pública para promover las viviendas asequibles. El 4 de octubre cierra una convocatoria para solicitud de propuestas de hasta $250 millones de fondos federales para el desarrollo de viviendas económicamente factibles para la población mayor, desempleada y los asalariados pobres.
Lastra indicó que durante un periodo de veinte años ha habido un intento de relocalizar a 'comunidades informales' que se han establecido en barrios o parcelas, que según dijo son inadecuadas 'porque ellos mismos los construyeron'.
'Lo que estamos buscando es poder habilitar centros urbanos; tratar de detener un poco ese desarrollo rural no adecuado porque muchas de estas casas no tienen sanitario, no tienen agua potable...', explicó, al resaltar las bondades de vivir en centros urbanos cercanos a áreas de trabajo y oficinas médicas.