Flor, el constructor: 'Napier es el futuro de la selección' (galería)
De todas las famosas habilidades del capataz de la selección nacional Flor Meléndez, el ojo para reconocer talento a larga distancia es una de las más importantes a la hora de eregir esta nueva versión del quinteto.
El ejemplo más reciente transformó la carrera de uno de los pilares de la selección en los próximos años. El joven canastero Edwin Ubiles pasó de venir del banco en nuestro Baloncesto Superior Nacional a Novato del Año en la liga de desarrollo de la NBA, con contrato de diez días con los Wizards de Washington, todo tras militar bajo la batuta de Flor en los juegos Panamericanos 2011.
JJ Barea y PJ Ramos, entre otros, participaron de la práctica del preseleccionado.
'Ese tipo de torneo como los Panamericanos y ahora Centrobasket, nos da la oportunidad de ver jugadores jóvenes en cancha con veteranos y contra un nivel de competencia alto. De ahí uno sabe quien puede seguir siendo parte del núcleo y quien no' expresó Flor.
He ahí el dilema con el que se encuentran muchos de los entrenadores de todo el mundo al moldear un equipo ganador. Cuándo es hora de traer una nueva generación de jugadores para que se mojen los pies en las competencias internacionales?
El seleccionado argentino, país donde Flor es venerado por sus grandes aportaciones al desarrollo del baloncesto, decidió, a finales de los 90', reemplazar muchos jugadores quienes todavía tenían gasolina en el tanque por una generación con gran potencial.
En años subsiguientes, jugadores mundialmente reconocidos como Juan Alberto Espil, uno de los mejores tiradores de todos los tiempos, Marcelo Milanesio y Esteban de la Fuente, retiraron su camisa en la selección nacional para dar paso a los jovencitos que culminaron dominando gran parte de la década del 2000 en olimpiadas y mundiales. El grupo consistía de Emanuel Ginobili, Luis Scola, Andres Nocioni, Pablo Prigioni, Fabricio Oberto y Walter Herrmann entre otros.
Meléndez le habla a sus canasteros.
Puerto Rico, que cuenta con la dicha que dentro de sus jugadores de más importancia, solo Carlos Arroyo y Andrés Rodríguez llegan a los 30 años, puede darse el lujo de disfrutar buen baloncesto por buen tiempo. Eso no significa que no hayan jóvenes esperando para brincar por la oportunidad. Es la ardua tarea de los dirigentes, jugar en esa cuerda floja entre experiencia y juventud.
'Hay jugadores jóvenes que a mi entender van a estar en la selección en los próximos años. (Shabazz) Napier es el futuro de la selección, va a estar en los próximos ciclos. Nosotros tenemos que asegurarlo en un torneo pa que ya sea jugador de Puerto Rico y eso es lo que pensamos hacer en Centrobasket', resaltó Flor sobre el joven de la universidad de Connecticut quien está en los radares de los equipos de NBA como una posible futura selección en el sorteo de novatos.
'Pero cuando uno tiene que escoger entre uno y otro yo escojo por la experiencia. Nosotros tenemos un torneo ahora que es el repechaje donde los jugadores tienen que tener mucha experiencia porque los equipos Europeos son muy buenos y si vamos a ver los dos jugadores que se han codeado en los últimos años con equipo europeos son Andrés (Rodriguez) y Arroyo en especial Andrés que lleva cuatro o cinco años jugando por allá y ya conoce a to el mundo. Eso es de provecho para el equipo' concluyó Meléndez.
Renaldo Balkman pasa el balón durante uyno de los 'scrimmages' de práctica.
El joven prospecto por su parte se está viviendo la experiencia al máximo y se presenta muy humilde y agradecido con todo, 'Si no formo parte del equipo ahora tal vez en cuatro años sí. J.J. (Barea) y Carlos (Arroyo) no se están poniendo más jóvenes. Estos puede que sean sus últimos años y puede que tenga que integrarme al equipo. Estoy tratando de aprender los mas que pueda del (Barea) tratando de ser como un esponja, la manera en que controla el balón y la manera en la cual ve las defensa, tu sabes él es J.J. y ha sido grandioso aquí' expresó un animado Napier.
Le baja la presión a Flor
En una práctica que pasó sin mucha pena ni gloria, uno de los sucesos mas llamativos fue ver a Flor dirigirse al camerino tras un bajón de presión. 'Me bajó la presión un poquito pero está todo bien. Yo tomo unos medicamentos para la presión y creo que necesito que me los bajen o quitar alguno y de aquí salgo ahora para el cardiólogo que me van a hacer unos exámenes en la tarde pero todo bien y tranquilo'.