La estelar armadora de las Gigantes de Carolina en el Baloncesto Superior Nacional Femenino (BSNF), Carla Cortijo, está lista para completar su regreso a cancha y ayudar así a su quinteto en la búsqueda de su tercer título consecutivo.

La jugadora, con experiencia en la WNBA, reconoció que después de pasar por el quirófano por una cuarta ocasión, ya se encuentra dispuesta para retomar su carrera de atleta.

'Ahora mismo me siento en un 90 a 95 por ciento, he estado practicando con el equipo de Carolina literalmente completo. Me siento bastante bien, yo creo que ahora es cuestión de caer en cancha y ritmo, que pueda otra vez meter la bola. Lo que es mi rodilla me siento bien, no se me hincha ni nada que eso es positivo. Mi meta es mantenerme saludable para esta temporada', dijo a los medios del país luego de la conferencia de prensa del BSNF.

Cortijo sufrió una rotura en el ligamento en la rodilla derecha en octubre del año pasado. La jugadora, que perteneció al Dream de Atlanta en la WNBA, confesó lo frustrante del proceso de rehabilitación.

'Ha sido bien desesperante. Frustrante porque ya es mi cuarta operación de rodilla, primera en la rodilla derecha, pero ya he tenido tres en la izquierda. Yo sabía lo que había pasado tan pronto yo me lastimé esa rodilla. Ha sido bien frustrante porque este proceso de recuperación no es nada fácil', indicó.

'(El proceso) es más mental porque al principio cuando estaba en recuperación era todo mental. Cualquier cosa era pendiente a la rodilla que si me va a fallar o cualquier cosa. Este proceso es más mental que físico', reconoció Cortijo.

Orgullosa de sus '12 Guerreras'

Cortijo se conformó con tener que ver a sus '12 Guerreras' lograr la gesta histórica a través de su teléfono celular y distanciadas del equipo al que le ha dedicado tantos años. El no ser parte del momento frustró también ya que se mantuvo practicando con el seleccionado nacional.

'Estuve en el celular pegada con mi mamá. Nosotros tenemos un proyector que lo conectamos, lo pusimos en la sala de la casa y junto a la familia, me los gocé como si yo me los estuviese gozando', dijo Cortijo, quien fungió como parte del cuerpo técnico para el torneo CentroBasket, celebrado en Islas Vírgenes.

A pesar de que estuvo con ellas, Cortijo reconoció a sus compañeras y la gesta que hicieron y que lograron acabar con una espinita que tenía la jugadora.

'Esa fue una de las cosas. Yo quería estar en los dos torneos: el Centrobasket y el AmeriCup, pero eso no me quita todo lo que hicieron estas chicas. Estoy sumamente orgullosa, el hecho de ganarle a Cuba, eso era una espinita que yo tenía. Muy orgullosa de esas nenas por el logro que hicieron, clasificar al Mundial que nunca lo hemos hecho. Sí es un poco frustrante porque yo practicaba con ellos', puntualizó.

La Selección Nacional femenina llegó en el tercer puesto del Centrobasket con foja de 4-1, mientras que en el AmeriCup, se agenciaron de la medalla de bronce y el último boleto clasificatorio al Mundial de España en 2018.