En sus propios terminos y con una medalla de plata al cuello Amanda y Angelica Ortiz, dos de las cuatro hermanas que forman parte del Equipo Nacional del polo acuático, se despidieron del deporte al que se entregaron por más de una decada con una carrera llena de sacrificios y recompensas.

El juego por la medalla de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018 fue el punto final. No hay reproches ni arrepentimientos al no alcanzar la presea dorada porque la obtenida significa el sacrificio que tanto ellas como sus allegados realizaron durante todo este tiempo.

'Si la despedida fue obtener los resultados de todos los sacrificios y si el resultado fue medalla de plata… nosotras dimos hasta lo último. Hemos hecho hasta lo imposible. Estamos bien contentas de llegar. Esto fue un camino bien largo. Yo creo que por nosotras no apostaban nada, ni nos iban a traer. Llegar hasta aquí, hasta la final fue un logro grande', dijo Amanda el pasado jueves despues de agenciarse la plata.

'Obviamente quien no quiere la medalla de oro, pero la medalla de plata significa como dice ella, muestra del esfuerzo que hemos tenido. Se lograron muchas cosas. No solo somos cuatro hermanas, somos profesionales y le metemos tiempo despues a las prácticas, madrugar a las 5:00 a.m. Esto significa todo el sacrificio que hicimos. Hicimos patria. Estamos aquí', agregó Angelica.

Amanda y Angelica, empresaria y enfermera anestesista, respectivamente, se dedicarán a sus carreras profesionales, con las cuales han creado un balance perfecto con el deporte. Amanda en particular, seguirá al frente de la empresa familiar Ocho Agujas, dedicada a la manufacturación de uniformes deportivos.

'Soy mujer empresaria. Es bien sacrificado. Mi matrimonio tambien. Creo que ya llegó el momento de dedicarme un poco más a mi matrimonio. Los sacrificios no solamente los sufrimos nosotros sino tambien las parejas. El trabajo. Nosotros tenemos una compañía familiar. Hay que meter mano. 20 años fueron más que suficientes. Dejamos las puertas abiertas a las juveniles que eso es lo más que queríamos', apuntó Amanda, quien en el último partido salió por faltas.

En cambio, para Angelica, regresar a las filas nacionales era impulsado por el deseo de volver a competir en las aguas junto a sus hermanas luego de ausentarse a los Juegos Centroamericanos y del Caribe Veracruz 2014 para completar sus estudios.

'Lo que me empujó fue hacer mi ultima selección con mis hermanas y con la familia que somos con las otras nenas, no poder estar en los Centroamericanos pasados por estar completando mis estudios en anestesia. Nosotras estábamos aquí para dejarle las puertas abiertas a las juveniles y otras atletas que les quedan camino', subrayó Angelica.

Ambas se mostraron a la disposición de continuar ayudando a las categorías juveniles y con el conjunto nacional como lo han hecho hasta el momento. Se desconoce si Cristina, que trabaja con Amanda en la empresa y Alejandra, farmaceutica, continuarán en el equipo.

No obstante, el presidente de la Federación de Natación de Puerto Rico (FNPR), Morgan Toro, indicó a este medio que tendrán conversaciones con la intención de que las hermanas continúen en la escuadra para los importantes compromisos internacionales que se avecinan.

'El polo acuático tiene grandes retos y las Ortiz son pieza esencial. Lima 2019 es un gran reto y tenemos que tener los mejores', dijo el Presidente federativo mediante comunicación escrita.

Con la medalla de plata conquistada, el polo acuático femenino aseguró su clasificación a los Juegos Panamericanos Lima 2019.