Confirman recesión en España
Madrid - La economía española entró en recesión tras caer un 0,3 % entre enero y marzo y sumar dos trimestres consecutivos de contracción, según las cifras definitivas publicadas hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La contracción del 2,6 % de la inversión y del 0,9 % de las exportaciones, unido al estancamiento del consumo y al recorte del gasto público, provocaron el decrecimiento de la economía entre enero y marzo, según la fuente.
El pasado 30 de abril el INE ya avanzó que la economía española había entrado en recesión, dato confirmado hoy.
Asimismo, el Instituto de Estadística corroboró que la caída interanual (primer trimestre con respecto al mismo periodo del año anterior) fue del 0,4 %, fruto de una mayor contracción de la demanda nacional y de una contribución menos positiva del sector exterior.
La destrucción de empleo se acentuó al caer a un ritmo interanual del 3,8 % (medio punto más que en el trimestre precedente), lo que supone una reducción neta de 655.000 puestos de trabajo a tiempo completo en un año que se repartió entre todas las ramas de actividad sin excepción.
La construcción ha perdido más de 310.000 empleos en el último año; los servicios, casi 245.000; la industria, casi 87.000, y las ramas primarias (agricultura, silvicultura, ganadería y pesca), más de 13.000.
De la evolución de la economía durante el primer trimestre en comparación con el anterior destaca la caída del 5 % de las exportaciones de servicios, así como una mayor contracción del 3,8 % del gasto que los no residentes hacen en España.
Por el contrario, las exportaciones de bienes repuntaron un 1 %.
Las importaciones de bienes y servicios moderaron su caída, al contraerse el 1,3 %, cuando un trimestre antes estaban bajando a un ritmo del 6,5 %.
Diferente es la evolución interanual, ya que en comparación con un año antes las exportaciones todavía siguen creciendo (2,2 %), aunque han moderado su subida más de tres puntos, mientras que las importaciones acentúan su caída hasta el 7,2 %.
En lo que respecta a la evolución trimestral de la demanda nacional, cabe señalar el deterioro de la inversión.
El consumo de los hogares se quedó parado, frente a la caída de un punto que registró el trimestre precedente, mientras que el gasto público bajó tres décimas.
No obstante, en comparación interanual el consumo de las familias todavía cae el 0,6 % y el recorte del consumo público se eleva al 5,2 %, en tanto que la contracción de la inversión llega al 8,2 %.
Por el lado de la oferta, se produjeron caídas de actividad trimestrales en la industria manufacturera, la construcción y los servicios, mientras que en la agricultura y la ganadería la actividad repuntó el 1,9 %.