Log In


Reset Password
SAN JUAN WEATHER
Economía

Madre y pobre: fórmula de exclusión del mercado laboral

En Puerto Rico un porcentaje altísimo de mujeres madres y pobres que el sistema no les permite acceder al mercado laboral. Sin auto, con niños y sin red de apoyo es casi imposible que puedan mantener un empleo. Es la cara de la madre pobre, que no puede salir de la pobreza porque nuestro sistema no la toma en cuenta.

Para Amárilis Pagán, portavoz del Proyecto Matria, la estructura laboral en nuestro país está construida desde la premisa que una persona no tiene hijos ni carga familiar; y que puede montarse en un carro, estar dos horas en la carretera, ocho horas trabajando y después montarse dos horas más de regreso a su residencia. A la maternidad se le pone barreras.

'La primera barrera estructural es no tener qué hacer con los niños para poder ir a trabajar, considerando que hay miles de familias en PR que están lidereadas por mujeres y que no necesariamente existen las familias extendidas de antes, donde había una abuela que se quedaba en la casa y cuidaba los nietos o una tía mayor que cuidaba los niños de los hermanos menores. No existe red de apoyo', explicó Pagán.

Otra barrera es la falta de transportación que empeora el caso, ya que muchos de los empleos que el gobierno ha incentivado son en megatiendas con horarios rotativos hasta altas horas de la noche. En puerto rico no hay rutas de transportación pública que cubran todas las zonas y donde las hay no tiene horarios confiables. Un día esperas por la guagua diez minutos y otro día te toma una hora.

'Cuando tienes mujeres como el perfil de las participantes del Proyecto Matria, que nunca en su vida han tenido auto y a veces viven en comunidades rurales o urbanas que quedan aisladas de los centros donde se generan los empleos ves casos que van desde levantarse tempranísimo y a veces caminar media hora o una hora para llevar los niños a las escuela pues no siempre hay transportación escolar disponible.

El horario de estos centros tampoco se ajusta al horario laboral pues terminan a las 2:30 p.m., pues un empleo normalmente es de 8:00 a.m. a 4:00 p.m. ó5:00 p.m.', sostuvo.

De acuerdo a la líder feminista, otro problema es que se incentiva el salario mínimo, que con el costo de vida, deja a la persona viviendo en estado de pobreza. Esto hace que algunas mujeres, madres y pobres ni se planteen entrar al mercado laboral ya que pierden tanta energía en resolver lo cotidiano que trabajar no es una opción. En muchos casos dependen del sistema público de salud y pasan días en trámites médicos. Se le van los días buscando papeles para que atiendan a sus hijos con condiciones.

'Hay un estudio del Centro para la Nueva economía que lo comprueba. Si es una persona que está recibiendo el PAN o ayudas del gobierno le retiran los beneficios. Eso hace que la que se decidió entrar al mercado de trabajo, cuando entra y se da cuenta que va a vivir igual de pobre con el salario mínimo, en un empleo inestable deja el empleo y prefiere recibir la ayuda del gobierno porque económicamente están casi iguales', aseguró.

(Archivo/NotiCel)
Foto: