Se arma el consumidor ante la crisis, según MIDA
Shoppers, cupones, mayor planificación y un análisis cada vez más ponderado, son parte de las herramientas y hábitos que el consumidor puertorriqueño está empleando ante la situación económica para maximizar su presupuesto al momento de realizar la compra, esto es parte de las conclusiones arrojadas en el estudio Radiografía del Consumidor 2016, comisionado por la Cámara de Mercadeo, Industria y Distribución de Alimentos (MIDA), se informó el jueves.
'Encontramos este año a un consumidor que aprendió a vivir con la situación económica y se está equipando para sobrevivir. Es un consumidor que hace malabares con su presupuesto y se arma de todas las oportunidades que ha generado la competencia entre detallistas', adelantó Mario Rodríguez Martínez, presidente del comité Radiografía del Consumidor en un comunicado de prensa.
Los datos muestran que el 31 por ciento de los consumidores está comprando menos cantidades y un 26 por ciento está seleccionando productos en especial. Mientras, el 21 por ciento compra marcas más económicas y el 18 por ciento deja de comprar ciertos tipos de productos. Además, está planificando con mayor detenimiento lo que compra y lo que necesita. Un 65 por ciento de los encuestados afirmó que planifica más su proceso de compra. Esto contrasta con el 43 por ciento que reportaron los encuestados en 2007.
Los consumidores han optado también por reducir sus gastos de manera significativa. Para ello, han hecho recortes en varios renglones. En ropa y accesorios han reducido un 40 por ciento, en vacaciones 36 por ciento, en cable de televisión un 31 por ciento y en entretenimiento un 29 por ciento. De igual modo, han Un 54 por ciento ha reducido la frecuencia con la que sale a comer fuera del hogar. El 47 por ciento está cocinando en casa. Mientras, el 24 por ciento ha dejado de ir a restaurantes formales o casuales y el 19 por ciento dejó de ir a restaurantes de comida rápida.
A pesar de los ajustes dramáticos que está haciendo el agente comprador, las conclusiones del estudio revelan oportunidades para aumentar el 'ticket' de compra. Por ejemplo, en los segmentos de productos que tradicionalmente no se compran en el supermercado. Para ello, se recomienda a los detallistas evaluar el inventario de productos, precio, posicionamiento y las estrategias promocionales. Además, expandir la cartera de comidas internacionales, maximizar ofertas de alimentos fáciles de preparar y promover más los productos locales son algunas de las sugerencias de los presentadores del estudio.
Los hallazgos arrojaron, además, una reducción significativa del gasto mensual en compra de alimentos, de 425 a 406 dólares. Este es el gasto más bajo registrado en los últimos diez años. A este se suma un aumento en la frecuencia de visitas a las tiendas de 1.68 veces en promedio por agente comprador. En 2015 se reportó un promedio de 2.97 versus un 4.65 visitas este año. El segmento de edad que muestra más marcadamente este hábito es de personas de 45 años en adelante.
Por primera vez, Radiografía del Consumidor empleó una innovadora herramienta, denominada 'Eye tracker', con la que realizaron un estudio cualitativo. Esta permite observar cómo los consumidores compran en la vida real y medir su comportamiento ante la góndola. Es un dispositivo tipo espejuelos con dos cámaras, que se coloca al agente comprador. Este graba su campo de visión, mientras rastrea pequeños movimientos de su ojo que generan un récord de todos los productos, empaques, rotulación y otros elementos con los que interactúa el consumidor.
El uso de este artefacto abre la posibilidad de medir el comportamiento auténtico desde el punto de vista del consumidor. Durante el estudio se presentaron múltiples vídeos en los que se observa al consumidor comparando shoppers, usando cupones, tachando la lista de compra y usando la calculadora para no salirse del presupuesto, reveló el presidente de la organización.
Según Roxana Trabanco de la firma investigadora Ipsos, uno de los resultados que nos brinda la herramienta es poder tener un análisis detallado del orden del recorrido dentro del establecimiento y los tiempos dedicados a la observación de cada sección. Esto ayuda a comprender si existe un patrón o preferencia de recorrido.
Entre los cambios y tendencias más notables reveladas este año, sobresale un aumento sustancial en la cantidad de personas que llevan comidas preparadas del hogar a su trabajo, mientras que cada vez el consumidor adquiere mayor conciencia sobre la alimentación saludable. Un 45 por ciento de los encuestados afirmó llevarse comida de su hogar al trabajo, versus un 6 por ciento que indicó hacerlo en 2007. Esto refleja un aumento de 39 por ciento en los últimos nueve años.
Por otro lado, el agente comprador está dando mayor importancia al consumo de productos más saludables, mostrando inquietudes por el contenido nutricional y adoptando una mejor alimentación. A un 59 por ciento de los encuestados le gustaría que los establecimientos resaltaran información nutricional de productos bajos en azúcar. Le siguen los bajos en sal con un 53 por ciento de los consumidores, los altos en fibras con un 40 por ciento, los bajos en calorías con un 39 por ciento y los altos en proteínas con 36 por ciento.
El 26 por ciento de los consumidores utilizan el shopper en su proceso de compra. Mientras que en la utilización de los cupones se vio un aumento conservador. El año pasado se reflejó un 21 por ciento de uso, mientras este año, el uso de cupones alcanzó un 26 por ciento.
Datos recopilados demuestran que un 36 por ciento de las marcas tienen secciones de cupones en sus páginas o estan creando su propio programa de lealtad. Además, el 81 por ciento de los consumidores dijo que la accesibilidad a los descuentos, ofertas y cupones afectaron su disposición a pagar el precio regular.
Los supermercados donde los consumidores alegan comprar con mayor frecuencia pertenecen a la cadena Econo. Un 43 por ciento de los encuestados afirmó comprar en estos, seguido por un 11 por ciento que compra en Amigo.
El precio sigue siendo la razón principal para elegir visitar un establecimiento. El 51 por ciento visita con mayor frecuencia una tienda basado en el precio. Mientras, el 24 por ciento lo hace por su localización y el 14 por ciento por la variedad y disponibilidad de productos.