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Gobierno

De las patas que aún cojea FEMA en esta temporada ciclónica

Según se desprende de un informe de la agencia

La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en ingles) inició la pasada temporada de huracanes sin el personal suficiente para responder efectivamente a una epoca inusualmente activa.

A mayo de este año, FEMA cuenta con 11,476 empleados pero en un informe sobre el saldo de la pasada temporada la agencia reconoció que tras el paso del huracán María por Puerto Rico no contaba con el personal suficiente, antes movilizado a Texas y Florida que fueron afectados por el huracán Harvey e Irma, respectivamente. Por ello, tuvieron que enviar al campo de operaciones a profesionales que no contaban con la pericia suficiente en este tipo de desastres, retrasando la entrega de suministros y el monitoreo efectivo de estas distribuciones. Tambien reconoce que pudo haber aprovechado mejor la información de fuentes externas y data de preparación para que los empleados fuesen más efectivos en la Isla.

En el mismo informe FEMA apunta que proveyó coordinación logística para mover y distribuir las ayudas desde los centros de acopio a sobrevivientes del huracán cuando suponía ser una tarea para el gobierno local.

A FEMA aún le falta completar la revisión de su fuerza laboral, entrada ya la temporada ciclónica de 2018. Asimismo, debe revisar el marco de trabajo de respuesta nacional a emergencias o desastres y enfatizar la estabilización de líneas críticas en coordinación con sectores de la infraestructura en el Plan Operacional de Respuesta Interagencial Federal.

No obstante, consigna el informe que crearon un procedimiento estándar para personal del centro de movilización, localidad central para el entrenamiento de empleados antes de desplegarlos al campo de operaciones.

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De otro lado, la Agencia pareció reconocer la ausencia de productos de planificación accesibles, inclusivos y de fácil ejecución, por lo que el desarrollo de los mismos forma parte de las recomendaciones contenidas en el informe. La respuesta de FEMA en Puerto Rico tras el devastador 20 de septiembre ha sido criticada especialmente por su burocracia y lentitud.

Sin embargo, FEMA asegura en el informe que está modernizando el proceso de inspección de hogares para mejorar la experiencia a los damnificados además de dejar la puerta abierta a obtener la autoridad para concesión de subvenciones a modo de mejorar las opciones de vivienda temporera así como reincorporar el uso de unidades de vivienda móviles (RVs) como las que se usaron durante el huracán Katrina.

Mientras, la Agencia entendió la necesidad de conocer más de cerca las cadenas de distribución a nivel local, regional y nacional así como aumentar el almacenaje de suministros fuera de los Estados Unidos continentales, mejorar la planificación de transportación y la capacidad para movilizar personal con mayor rapidez a las localidades más remotas.

La primera ayuda que llegó por parte de FEMA el 23 de septiembre descargó en el puerto de San Juan sobre 900 mil litros de agua, seis mil toldos y 31 generadores electricos. Ese mismo día, comenzaron los vuelos diarios con suministros. A cinco días de la llegada de María, el centro de acopio en Puerto Rico no contaba con un solo toldo y las comidas no llegaban ni a cien mil, pues gran parte de esos suministros se enviaron dos semanas antes a las Islas Vírgenes estadounidenses, azotadas por el huracán Irma.

A petición del gobernador Ricardo Rosselló Nevares, FEMA estableció y manejó un centro de acopio en Jacksonville, Florida, para recibir donaciones que luego serían transportadas a Puerto Rico. La Agencia tambien coordinó con agencias federales y el sector privado la movilización de materiales como postes, generadores, bombas de agua, equipo de aviación y para tratamiento de aguas. Pese a que tambien proveyeron telefonos satelitales para hospitales y alcaldes no resultaron en un metodo efectivo de comunicación por la inexperiencia de los usuarios y la falta de instrucciones para su uso.

FEMA asegura en su reporte que aumentaron el almacenamiento de agua y comidas seis veces, añadieron 300 generadores a su inventario y renovó contratos nacionales para manejo de evacuaciones, transportación en el Caribe y ambulancias. Tambien están mejorando las herramientas de comunicación con la obtención de radios móviles terrestres hasta comunicaciones satelitales.

Vista aérea de toldos azules en residencias tras huracán María. (Nahira Montcourt / NotiCel)

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