El futuro digital de Hollywood todavía en ascuas
La subida de precios en la tarifa de precios del popular servicio Netflix, de $10 a $16 al mes, es sólo uno de los síntomas de que todavía Hollywood no ha encontrado la fórmula con la que evitara ahogarse en el tsunami digital que ya arropó a la industria de la música.
Según reportó BBC, los estudios de Hollywood tienen su mirada puesta en el negocio de la venta en línea de películas, como Netflix. Lo ven como el potencial sucesor de las ventas de DVDs, que alimentaron con cientos de millones de dólares anuales sus arcas en la última década y aún -aunque mucho menos- siguen generando ingresos.
Pero de acuerdo con un reciente reporte de la firma de investigación de mercado IHS Screen Digest, es posible que el futuro pruebe a esa esperanza como vana.
Hay dos formas fundamentales de distribución -legal- de películas en línea: la venta, que implica que el usuario descarga en algún dispositivo su filme elegido, para verlo cuando quiera, las veces que quiera; y el equivalente a un alquiler, mediante el que el usuario ve la película a través de internet, como si fuera un video de YouTube.
Para los estudios, la venta es la alternativa que genera mayores márgenes de ganancia. Dependiendo del mercado y del producto, puede ser entre dos y tres veces superior al del alquiler.
Según clic IHS Screen Digest, de los $242.6 millones que generó el negocio de la distribución en línea fuera de Estados Unidos, $140.3 millones correspondieron a ventas. Pero la mayoría de las transacciones fueron para ver películas a través de internet: 21.4 millones, de un total de 35.8 millones.
Y la firma pronostica que para 2015 la tendencia de los consumidores -que se repite en EE.UU.- de volcarse hacia esta última alternativa, más económica y conveniente, se acentuará.
Para más información, vea BBC.