A juicio la experiencia previa de los candidatos a la gobernación
Mucho se ha mencionado el termino 'experiencia' en este ciclo electoral, en parte por la presencia de dos candidatos sin afiliaciones partidistas y la incursión del hijo de un exgobernador en la política.
Durante sus participaciones en los debates, foros o conversatorios, los seis aspirantes a ocupar la Fortaleza han optado por destacar sus niveles de experiencia, ya sea a modo de engrandecerse ante sus contrincantes, o bien atacándolos.
Solo dos de ellos han fungido como servidores públicos anteriormente: el candidato por el Partido Popular Democrático (PPD), David Bernier Rivera, y la candidata por el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), María de Lourdes Santiago Negrón. Ambos siguen una larga tradición en la cual los gobernantes han ocupado otros escaños políticos antes de llegar a La Fortaleza y, por tanto, parecerían los más aptos para asumir el cargo. Sin embargo, eso no necesariamente los cualifica para gobernar.
Según José Rivera, profesor de Ciencia Política, ninguna experiencia que puedan tener los candidatos en otras áreas se iguala a la de un primer ejecutivo.
'El 'issue' de la experiencia es relativo. Independientemente de la experiencia que tengan, gobernar como primer ejecutivo es una experiencia completamente distinta a la que han tenido. Por ejemplo, todos sabemos que Manuel Cidre Miranda es un empresario exitoso y bastante experimentado, pero administrar una empresa no es lo mismo que administrar un gobierno, sobre todo un gobierno excesivamente burocrático en términos de la empleomanía, de la cantidad de agencias que tiene, de lo controversial que es gobernar en una isla donde la política partidista es una cotidianidad que menoscaba cualquier esfuerzo y buena iniciativa', expresó Rivera, actual profesor de la Universidad Sagrado Corazón.
El profesor mencionó el caso del doctor Pedro Rosselló quien laboraba como cirujano pediátrico y directo médico del municipio de San Juan y luego fue gobernador durante ocho años. Para Rivera, 'todas estas cosas no le brindaron la experiencia suficiente para ser gobernador, igual tuvo que aprender sobre la marcha, pero lo peor aún es que más allá de su arrogancia al gobernar, me parece que su profesión médica le impidió por ejemplo mirar los matices que es gobernar, o sea de que tienes que gobernar con la oposición y para aquellos que no votaron por ti, no solamente para aquellos que son tus fanáticos'.
De los candidatos actuales, Bernier, de 40 años, se ha desempeñado como director de la Oficina de la Juventud, Secretario del Departamento de Recreación y Deportes, Presidente del Comité Olímpico y Secretario de Estado. También, fue Presidente del Comité Organizador de los Juegos Centroamericanos y del Caribe en el 2008, además de su preparación académica como dentista desde el 2003. En total, lleva 13 años como servidor público.
Santiago, por su parte, es quien más tiempo lleva como funcionaria electa entre los candidatos actuales, pues cuenta con 19 años de labor en el gobierno. En el 2001 fue electa como vicepresidenta del PIP, y en el 2005 juramentó como Senadora por Acumulación, convirtiéndose en la primera mujer legisladora de su partido. Este cargo lo ocupó hasta el 2009, espacio que recuperó en el 2013.
Para Rivera, los puestos que ambos han ocupado tampoco se asemejan lo suficiente al cargo de gobernador.
'Ser funcionario electo, sea Senador o Representante, no te cualifica para ser gobernador. O sea, no te da la experiencia necesaria para ser gobernador, más allá de que conoces las entrañas de por lo menos una parte de la institucionalidad, en este caso la legislatura. Ahí eres un legislador de muchos que trabaja una comisión o un subcomité o que tiene que estar en la oficina recibiendo ciudadanos o entidades. No es lo mismo trabajar en esa dinámica que trabajar en la gobernación. El puesto de gobernador recibe muchos más cantazos', aseguró Rivera, quien fue profesor de la Universidad de Puerto Rico (UPR), Recinto de Río Piedras.
Según el profesor, la experiencia más cercana a la de un gobernador la reciben los alcaldes de ciudades grandes, como San Juan, Mayagüez y Ponce porque se les ha delegado una gran cantidad de servicios al ciudadano. Históricamente, Puerto Rico cuenta con dos exalcaldes de la ciudad capital que se convirtieron en gobernantes: Carlos Romero Barceló, quien ocupó la silla por espacio de ocho años y luego se dirigió a la Fortaleza, y Sila M. Calderón, alcaldesa por un cuatrenio y la primera gobernadora mujer de la isla.
Fuera de Bernier y Santiago, los demás candidatos son el profesor universitario Rafael Bernabe Riefkohl, el doctor Ricardo Rosselló y el empresario Cidre y la licenciada Alexandra Lúgaro Aponte, ambos candidatos independientes.
Bernabe, del Partido del Pueblo Trabajador (PPT), posee un Doctorado en Sociología de la Universidad Estatal de Nueva York y se ha dedicado a la academia por los pasados 27 años por su rol como profesor e investigador en la UPR. En el 2012 aspiró a la gobernación por primera vez y obtuvo alrededor de 18 mil votos.
Mientras que Rosselló, del Partido Nuevo Progresista (PNP), no posee experiencia formal de trabajo en el servicio público fuera de su breve y cuestionada estancia como profesor en la UPR en el 2012. En el 2014 también fue profesor del Sistema Universitario Ana G. Méndez. Fuera de eso, en el 2010 fue cofundador de Prosperous Biopharm Corporation, Ltd junto a otros investigadores. El propósito de la compañía es el descubrimiento y desarrollo de drogas para lidiar con el cáncer y otras enfermedades del sistema nervioso.
En el caso de Cidre, su labor se ha centrado en el sector privado como empresario y fundador de la panadería y repostería Los Cidrines. En sus 40 años como negociante, ha presidido la Asociación Productos de Puerto Rico, la Asociación de Industriales de Puerto Rico y la Alianza para el Desarrollo de Puerto Rico, entre otros.
Lúgaro, por su parte, obtuvo su Juris Doctor de la UPR, Recinto de Río Piedras en el 2006. Desde ese año ejerce la abogacía en el sector privado. También, ocupó la dirección ejecutiva de América Aponte y Asociados, corporación que ofrece programas educativos a estudiantes, padres, maestros, directores y supervisores.
'El que seas doctor, empresario o que tengas una combinación de grados no te hace efectivo como gobernante. Yo pienso que la persona para gobernar y estar ahí tiene que ser capaz de ver el gran esquema. Es decir, qué es Puerto Rico, cuáles son los problemas que tiene Puerto Rico, cuáles son los proyectos que se están desarrollando, los que están en plena faena y claro, tú incorporar tus promesas programáticas ahí. Es una cuestión de es conversar con el público, con la ciudadanía, con la oposición política, con los legisladores de tu partido y tratar de crear una visión de proyecto de país que te permita hacer las cosas', recalcó Rivera.
Historial en servicio público
A diferencia de los candidatos actuales, la mayoría de los pasados gobernantes fueron servidores públicos antes de gobernar.
Por ejemplo, el gobernador actual, Alejandro García Padilla, fue Secretario del Departamento de Asuntos del Consumidor (DACO) en el 2005 y Senador por Acumulación en el pasado cuatrenio. Por otro lado, tanto Luis A. Ferré como Rafael Hernández Colón fueron legisladores antes de ser gobernadores.
Si miramos un poco más atrás, el primer y único gobernador puertorriqueño impuesto por los Estados Unidos, Jesús T. Piñero, contaba con 17 años de experiencia antes de ocupar el cargo de primer mandatario.
Durante las primarias del PNP, el Comisionado Residente Pedro Pierluisi habló de la experiencia como una cualidad que él posee por encima del ahora candidato a la gobernación, Ricardo Rosselló, y del partido en general sobre el gobierno actual. Igualmente, Bernier ha utilizado la falta de experiencia de Rosselló como eje durante sus diversas exposiciones en debates.
De la misma manera, Rosselló ha destacado que la experiencia de Bernier se ha dado durante el gobierno actual, uno que a su entender le ha fallado al pueblo y ha propiciado un desastre.
'Toda la experiencia del mundo en otros renglones, en otras profesiones no te va a dar la experiencia suficiente para tú aguantar el embate de lo que viene una vez te sientas en la silla ejecutiva', finalizó Rivera.