El presidente estadounidense, Barack Obama, y el primer ministro de Reino Unido, David Cameron, propondrán mañana en la cumbre del G-8 en Deauville (Francia) un programa de apoyo a los movimientos prodemocráticos que se están produciendo en los países árabes.

Así lo aseguraron en una rueda de prensa tras reunirse en la residencia del mandatario británico, donde abordaron asuntos como la intervención de la OTAN en Libia. Ambos reiteraron la llamada al dictador libio, Muamar el Gadafi, para que abandone el poder, para lo cual están decididos a mantener e incluso incrementar la presión sobre su régimen, publica el diario español El País.

En la comparecencia, ambos han abogado por la salida de Gadafi del poder. Obama ha sido contundente al decir que Gadafi debe 'dejar Libia al pueblo libio'. Cameron ha dicho que Gadafi 'debe irse' y que 'es imposible imaginar un futuro para Libia con Gadafi en el poder'.

Asimismo, Obama dejó claro que 'no cejarán' en la presión contra el dirigente libio y Cameron sostuvo que que utilizarán 'todas las opciones' a su disposición para aumentarla.

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