Denuncian crímenes de guerra de ambos bandos libios
Las fuerzas de los dos bandos en el conflicto de Libia han cometido crímenes de guerra, según un informe de Amnistía Internacional.
Y si las nuevas autoridades no restauran el orden, se expone al país a un posible círculo de violencia, sangre y represalias, denuncia la organización de derechos humanos en un informe de más de 100 folios publicado hoy, publica el diario español El País.
De acuerdo a la organización no gubernamental, los ataques indiscriminados de las fuerzas gadafistas contra los manifestantes libios fueron 'crímenes contra la humanidad', mientras las torturas, secuestros y detenciones arbitrarias supusieron 'crímenes de guerra'.
No obstante, Amnistía Internacional no limita su informe a los abusos de derechos humanos cometidos por los hombres del coronel Muamar el Gadafi.
La ONG condena de igual modo la actuación del contingente militar formado por los opositores y advierte de que la caída del líder libio tras 42 años en el poder ha degenerado en un 'vacío institucional y de seguridad' que puede sumir al país en una cadena de asesinatos y torturas por venganza.
Por este motivo, Amnistía se ha apresurado a pedir a las autoridades del Consejo Nacional de Transición que persigan la violación de los derechos humanos para situarlos en primera línea de batalla del nuevo Gobierno.
El informe se da aconocer justo el el día en queellíder del Consejo Nacional de Transición libio, Mustafá Abdul Yalil, realizó su primer gran discurso tras la caída del régimen dictatorial de Muamar el Gadafi en el que ha esbozado las líneas maestras que guiarán el futuro de Libia.
Ante 10,000 personas que abarrotaban la rebautizada como plaza de los Mártires, lugar emblemático de la revolución, en el centro de Trípoli, ondeando banderas con el color verde de los alzados, Abdul Jalil ha prometido la construcción de un Estado basado en la aplicación de las leyes 'de un Islam moderado'.
En su primera alocución tras el traslado del mando general rebelde desde Bengasi a Trípoli, Yalil ha pedido a sus seguidores que no caigan en la tentación de vengarse con violencia de la represión ejercida por los esbirros del extinto régimen durante más de cuatro décadas. Así, Yalil ha advertido que las nuevas autoridades libias no aceptarán que se instaure en el país árabe el extremismo ideológico.