Asesora de seguridad de Obama se verá con Karzai en Kabul
Susan Rice, la principal asesora de seguridad del presidente de EEUU, Barack Obama, está en Kabul para reunirse con el mandatario de Afganistán, Hamid Karzai, y visitar a las tropas estadounidenses en ese país, según informó hoy la Casa Blanca.
'Afganistán sigue siendo una de las prioridades de seguridad nacional de Estados Unidos', detalló en un comunicado la portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Caitlin Hayden.
Se trata del primer viaje al exterior de Rice como Consejera de Seguridad Nacional de Obama y, durante su estancia en Kabul hasta este martes, la asesora presidencial prevé reunirse con Karzai y con líderes afganos de la sociedad civil.
Además, Rice visitará a las tropas estadounidenses en Afganistán, para 'hacer balance' a medida que se avanza hacia la 'conclusión responsable' de la misión de la OTAN en ese país, prevista para finales de 2014, de acuerdo con la Casa Blanca.
La visita de Rice a Kabul se produce tras el reciente acuerdo alcanzado con Washington sobre las condiciones para prolongar la presencia militar de EEUU después de que concluya el proceso de retirada de las tropas de la OTAN de Afganistán.
El conocido como Acuerdo Bilateral de Seguridad (BSA, según sus siglas en inglés) prevé la presencia en Afganistán de entre 10,000 y 15,000 soldados de EEUU desde 2015 hasta 2024, en una nueva misión militar en la que deberán permanecer en sus bases y no realizar operaciones en áreas civiles sin el permiso de las autoridades locales.
La Loya Jirga (asamblea tradicional afgana) pidió este domingo que ese acuerdo se firme este mismo año, como quiere EEUU y en contra de la postura de Karzai de suscribirlo tras las elecciones presidenciales del próximo abril.
El presidente afgano abrió la puerta, no obstante, a adelantar la firma del acuerdo, al precisar en su discurso de clausura de la asamblea que está dispuesto a suscribirlo 'una vez que Estados Unidos muestre su disposición a cooperar en el proceso de paz'.
El acuerdo es rechazado frontalmente por el movimiento talibán, que horas después de que finalizara la reunión de la Loya Jirga emitió un comunicado en el que alerta de que cualquier presencia militar en Afganistán es 'absolutamente inaceptable'.