Obama defiende regularización de más de cinco millones de indocumentados
El presidente de EEUU, Barack Obama, defendió que la regularización de más de 5 millones de inmigrantes indocumentados anunciada hoy jueves no es una amnistía, como esgrime la oposición republicana, sino una medida 'moderada y de sentido común'.
'Sé que algunos de los críticos de esta medida la llaman amnistía. Bueno, no lo es. Amnistía es el sistema migratorio que tenemos actualmente, donde millones de personas viven aquí sin pagar sus impuestos o someterse a nuestras reglas, donde los políticos usan este asunto para asustar a los ciudadanos y buscar votos', señaló Obama en un discurso a la nación desde la Sala Este de la Casa Blanca.
'Quiero -reiteró- trabajar con ambos partidos para aprobar una solución legislativa más permanente. Y el día que firme ese proyecto de ley en ley, las acciones que hoy tomo ya no serán necesarias'.
Obama citó a su predecesor, el republicano George W. Bush, para reconocer el papel de los inmigrantes en el país asegurando que 'son parte de la vida estadounidense', con la intención de amortiguar las fuertes críticas que le han llovido por parte de los conservadores.
'Como una vez mi predecesor, el presidente Bush, dijo: Son parte de la vida estadounidense', afirmó el mandatario en su alocución desde la Casa Blanca.
'Ahora aquí está la cosa. Esperamos que la gente que vive en este país siga las reglas. Esperamos que los que cruzan la línea no sean recompensados injustamente', aseveró el presidente, al insistir en que sus medidas no supondrán una 'amnistía' para todos los indocumentados.
Obama reiteró que sigue creyendo en que 'la mejor manera de resolver este problema es mediante el trabajo conjunto y aprobar un tipo de ley de sentido común'.
'Pero hasta que eso ocurra -puntualizó-, hay acciones que tengo la autoridad legal de tomar como Presidente, el mismo tipo de medidas adoptadas por presidentes demócratas y republicanos antes que yo, y que ayudarán a que nuestro sistema de inmigración sea más legal y más justo'.
El Mandatario aseguró comprender las preocupaciones de los más escépticos sobre su decisión, pero apeló a la historia de inmigrantes que vertebra al país y a sus valores.
'Somos una nación que tolera la hipocresía de un sistema en el que los trabajadores que recogen nuestra fruta y hacen nuestras camas nunca tengan la oportunidad de estar de acuerdo a la ley?', se preguntó.
'O somos -prosiguió- una nación que les da la oportunidad de hacer las paces, asumir sus responsabilidades, y dar un futuro mejor a sus hijos?'.
Las acciones ejecutivas anunciadas hoy evitarán la deportación de unos 5 millones de inmigrantes indocumentados durante tres años.
El grueso de esa cifra serán padres cuyos hijos sean ciudadanos estadounidenses o residentes permanentes, que demuestren que llevan en el país desde antes del 1 de enero de 2010 y que carezcan de antecedentes criminales.
Por otra parte, el Departamento de Seguridad Nacional laborará una nueva guía de acción para que la política de deportaciones se centre en criminales, en personas con delitos vinculados a la seguridad nacional y en quienes cruzaron la frontera desde el 1 de enero pasado.
Por su parte,el líder republicano de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, John Boehner, acusó al presidente Barack Obama de actuar como un 'emperador o un rey' al proponer de manera unilateral un paquete de medidas migratorias que regularizará a más de cinco millones de indocumentados.
'En lugar de trabajar juntos para arreglar nuestro sistema migratorio fallido, el presidente actúa por su cuenta. Y así no es como funciona una democracia', señala el republicano en un vídeo de 28 segundos publicado en el portal Youtube antes del discurso de Obama.