El veterano músico Hector Rodríguez depositó el futuro de su agrupación Atabal en las manos de su hijo Caymmi hace casi un año con total confianza. La pasión por la música y la admiración mutua entre padre e hijo han hecho que el grupo luzca más fuerte que nunca, aún en momentos cuando Hector enfrenta complicaciones de salud.

Recientemente se anunció que Hector fue diagnosticado con un tipo de cáncer llamado mieloma múltiple, que requiere varios tratamientos y un trasplante de medula ósea. Caymmi siempre demostró sentirse cómodo con la responsabilidad de liderar Atabal, pero desde que se conoció el padecimiento de salud de su padre, dejó aún más claro que su norte es no dejar caer el trabajo que su progenitor ha hecho por más de 35 años.

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De cada una de esas decadas de esfuerzo, Caymmi ha sido testigo, por lo que las palabras de admiración hacia su padre salen en medio de cualquier conversación.

'Ellos hicieron muy buen trabajo, porque nunca me dejaron sentir cuando estábamos pasando por momentos apretados económicos, en cuanto a una estabilidad… Me tomó años entender que se puede estar enamorado del arte, pero hay que convertirla en trabajo, que es a lo que se dedica mi papá. Él no es un poeta perdido que se va al monte a buscar inspiración. Esto es una cosa de que si quieres grabar tienes que buscar los recursos tú mismo y tener una vida funcional, tener chavos para pagar renta y hacer compra. Él ha sido un ejemplo de un loco por querer vivir del arte en Puerto Rico, pero cuerdo porque ha sabido llevar una casa y mantener una familia unida y estable', contó Caymmi a NotiCel.

El joven músico recuerda claramente cómo su papá se desvivía en el trabajo para darle un porvenir a su familia. Los días que dormía en los estudios, las despedidas de año en las que su padre trabajaba porque se cobraba el doble, y las horas interminables de ensayo. Y ese niño, nombrado como el cantante brasileño Dorival Caymmi, en un principio no sintió tanta inclinación por un instrumento pero fue inevitable que lo hiciera por el canto.

Aún su papá recuerda con nostalgia cuando su hijo llegó de la escuela, estando en quinto grado, y lo sorprendió al decirle que iba a cantar 'Villancico Yaucano'.

'Yo dije: 'No podía ser otra? Esa tiene sus complicaciones', y el me dijo: 'Es que esa es la que me gusta'. Así que busque a un gran amigo guitarrista que lo acompañara y lo hicimos', recordó, mientras Caymmi lo miró sonriendo.

Hector formó Atabal hace unos 35 años, mientras su hijo se integró hace 10, en un principio, como 'band boy', luego se encargó de la venta de discos en las presentaciones y, finalmente, llegó a convertirse en el director. Desde esta posición, además de sus funciones obvias, se ha dedicado a refrescar el grupo, ponerlo al día en plataformas digitales de música y en la comunidad social digital.

'Él es mucho más disciplinado que yo, la práctica y el ensayo son parte de su vida diaria y eso es bien importante para un músico. Además, en terminos de carácter y cómo brega con sus compañeros… me ha dado muchas satisfacciones en la vida', expone Hector. 'Hemos viajado juntos, hemos compartido la vida de padre e hijo, y de director y músico. En este último año, ha cogido el grupo, y dirige, cita ensayos y busca repertorios. Me siento orgulloso de lo que ha hecho y se que hará bien lo que le falta por hacer. Es un proceso largo, pero lo que ha hecho, tiene mucho merito', agregó.

Padre e hijo están mucho más unidos ahora que Hector requiere tratamiento medico. El músico ya completó su ronda de quimioterapia y ahora le corresponde el trasplante de medula ósea, que se realizará a finales de junio.

Para Caymmi es un alivio conocer que le ocurre a su papá, pues venían atendiendo ciertas afecciones a ciegas, como su cuerpo encorvado, la voz un poco tensa y la perdida abrupta de peso.

'No era el diagnóstico que queríamos, pero ya tenemos algo y lo estamos manejando', señaló, para despues narrar cómo al pasar de los años su padre se ha ganado el respeto de tanta gente de la industria.

Desde que se conoció que tenían que incurrir en gastos medicos, no se han detenido las muestras de apoyo y actividades de recaudo. Quienes deseen apoyar a Hector Rodríguez pueden hacerlo a traves de la cuenta de Banco Popular 229 352 116.