'Ese difícil gentilicio de ser puertorriqueño'
Comparto esta honrosa distinción con los compatriotas que ejercemos las artes en nuestro país hoy, ayer, mañana y siempre.
Agradezco de modo muy particular y significativo este honor que me confiere Su Majestad Juan Carlos I de España. Nos conocimos en Washington, D.C. siendo estudiantes ambos. Él, aspirante a la corona de su país, yo, aspirante a diplomático de un país, Puerto Rico, que carecía entonces, y todavía hoy, de soberanía política.
Juan Carlos alcanzó su destino manifiesto. Yo, por el contrario, modifiqué el mío al dedicarme a las artes, cruzando fronteras de todo tipo. Y fue en España, la patria de mi abuelo paterno donde se fortaleció mi puertorriqueñidad al valorar la parte hispana de mi múltiple herencia nacional que incluye la africana y la indígena.
Que sea la Orden del Mérito Civil en grado de encomienda la que se me confiere, me complace sobremanera pues es como parte del cuerpo ciudadano que desempeño las artes y me esfuerzo por contribuir a la creación de un pueblo. Nací ciudadano estadounidense por acta del congreso de ese país. Recibí hace un año la ciudadanía española por derecho de sangre, ya que mi abuelo, un carpintero mallorquín, jamás renunció a su ciudadanía. Y me esmero por merecer, al decir de mi querido Luis Rafael Sánchez, ese difícil gentilicio de ser puertorriqueño.
Gracias a las buenas artes del Señor Embajador, Honorable Eduardo Garrigues López-Chicheri, Cónsul General de España en Puerto Rico, hoy recibo la honrosa imposición, sustantivo y verbo difícil de conjugar en cualquier circunstancia, que se me confiere. Mis compatriotas, amigos y familiares lo celebramos como un extraordinario regalo de cumpleaños al filo de cumplir las tres pesetas mentás, setenta y cinco abriles y convertirme en un superadulto súper feliz.
Muchas gracias.
*El autor es artista residente de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Cayey. Discurso de aceptación de la condecoración recibida del Rey de España el 8 de mayo de 2014 en San Juan de Puerto Rico.