El Tribunal de Apelaciones confirmó la determinación de 'No ha lugar' emitida por el Tribunal de Primera Instancia (TPI) en la demanda radicada por la ex Miss Universe Puerto Rico 2016, Kristhielee Caride, en contra de los administradores anteriores de esa franquicia, Desiree Lowry y Luis Vigoreaux.

Según la sentencia del Apelativo, fueron varias las situaciones presentadas por Lowry y Vigoreaux las que probaban el incumplimiento del contrato que la reina de belleza firmó con la empresa PR Crown Entertainment y que consiguientemente fue cancelado, despojándola de la corona y el título de Miss Universe Puerto Rico 2016.

Para la modelo, la decisión del Tribunal de Primera Instancia erró en considerarla una empleada pues su relación era contractual, y en avalar su destitución Miss Universe Puerto Rico 2016 pese a esta no haber sido notificada previamente de sus violaciones, entre otras fallas.

No obstante, según la sentencia emitida por el Apelativo, Caride cometió varias faltas de su contrato que consiguientemente concluyeron en la terminación del empleo.

Entre estas faltas se encuentra un problema que suscitó cuando PR Crown Entertainment envió a Caride a una clase privada de maquillaje, en la cual la Miss Universe subió fotos a su cuenta de Facebook sin autorización previa de sus empleadores. Esto terminó causando problemas entre PR Crown Entertainment y el dueño del salón de belleza Bloom Salón, Junior Melendez.

Aunque intentaron reunir a Melendez con Caride para que esta explicara la situación, la reina optó por enojarse ante la situación y declarar que no volvería al lugar. Acto seguido, la mujer fue sorprendida por Lowry con estilista que le hacía cambios personales. La manejadora le prohibió que se le cambiara el color de pelo o el estilo de recorte que tenía la joven en ese entonces.

El Tribunal tambien hizo referencia al momento viral en el que Caride no quiso participar de una entrevista con los medios de comunicación en el municipio de Guayama.

'En la narrativa se manifiesta que, a pesar de que la señora Lowry le preguntó a la apelante si se encontraba bien y le prestó asistencia en contestaciones guías, la señora Caride no pudo completar satisfactoriamente la entrevista e hizo expresiones desatinadas', expone el documento.

Cuando PR Crown Entertainment intentó pautar una entrevista para la modelo, de manera de mejorar la imagen de esta con los medios, pero Caride se rehusó a ir pues fue notificada por Lowry a las 3:00 pm y la entrevista era a las 5:45 pm.

'Aludiendo al retraso en su llegada al programa, que supondría la congestión del tránsito de esa hora, y a una cláusula del Contraataque le requería a PR Crown Entertainment notificarle de las actividades a la apelante con 24 horas de anticipación, la demandante le indicó a Lowry que no podría participar del programa en la tarde', reveló además el Tribunal.

Por otro lado, la insinuación que emitió Caride, en aras de lograr una nueva celebración de su juicio, de la amistad entre Vigoreaux y el juez del TPI que presidió el caso, Eduardo Rebollo Casalduc, tambien fue desestimada.

'Ninguna expresión reprochable en las redes sociales surge de la información traída por la apelante en este señalamiento de error por parte del Juez que intervino en el juicio, como tampoco quedó establecido ningún vínculo entre este con una de las partes que sugiera parcialidad en sus determinaciones', decretó el Apelativo.

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