A pesar de haberse perdido de los escenarios hace dos decadas, Steve Perry, uno de los principales cantantes de rock y miembro de la emblemática banda Journey, que surgió del rompimiento de la legendaria agrupación del guitarrista Carlos Santana, el vocalista regresó en estos días a una tarima repleta de fanáticos que aclamaban su regreso.Don't stop believing

Con sus característico estilo de malas palabras y ausente de las salas de conciertos desde la década del 1990, Perry cantó con su ronca voz la canción de otro grupo del género con un nombre impublicable ante una audiencia que llenó un pequeño recinto en el estado de Minnesota.

El cantante atraviesa problemas de artritis, sus caderas y otras condiciones de salud que han sido más reseñadas que su ausencia de los escenarios, según reportó el portal cibernético Yahoo! Music.

Su aparición fue junto a la agrupación Eels y la vida del cantante ha estado marcada por sus tragedias personales, incluyendo la pérdida de su madre y su novia tras una batalla contra el cáncer.

Los éxitos que interpretó Perry con Journey y los que pudo cantar en estos días tras un cuarto de siglo de ausencia de una tarima, incluyen Open Arms, Lovin', Touchin', Squeezin' y, por supuesto, Don't Stop Believing, los cuales han sido reproducidos en series estadounidenses tales como Glee, The Sopranos, American Idol, Rock of Ages y tantas otras, al igual que en películas de Hollywood.

Hace poco tiempo, el exguitarrista de Santana, Neal Schon, desmintió rumores que él y otros exmiembros fundadores de Journey, tres de los cuales salieron del grupo de rock latino, como el baterista Mike Shrieve y el tecladista Gregg Rollie, planifiquen una reunificación.

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