Nueva esperanza en San Isidro con viviendas de la organización TECHO
Flavia Mendez reside en Puerto Rico desde hace 20 años, pero no fue hasta hace diez que se asentó en la comunidad Valle Hill, Canóvanas, junto a sus hijos. El huracán María, con sus tantas pulgadas de lluvia, inundó su hogar y causó perdidas totales.
Pese a que por los pasados tres meses habita una casa vecina --justo detrás de la suya--, hoy tiene la esperanza de pintar su nuevo aposento gracias a la fundación sin fines de lucro TECHO.
'Hoy me la entregan. La quisiera pintar como de verdecito por fuera, me gusta el verde, y brown por dentro', soltó mientras admiraba lo que sería su residencia.
Se trata de un módulo habitacional básico, de 24 x 16 pies y lo suficientemente elevado para elevado evitar inundaciones repentinas. La estructura se compone de paneles de madera, bases en hormigón y una plancha de zinc atornillada para sostener ventoleras.
Su construcción surgió a partir de la iniciativa TECHO, organización chilena impulsada por la gestión comunitaria para construir viviendas y erradicar la pobreza. Para su trabajo en Puerto Rico, reclutaron a unos 60 voluntarios puertorriqueños que, de primera instancia, auguran la construcción de 250 hogares alrededor de la isla.
En Valle Hill erigieron tres con la ayuda, incluso, de Vladimir, hijo de Flavia y de 16 años de edad.'Deben de haber más como ellos, habemos muchos necesitados y de nosotros no se acuerda nadie. Mira de dónde viene esa gente, porque de aquí no ha venido nadie a darle una ayuda a uno', resintió Flavia, en alusión a que en su comunidad no existen los títulos de propiedad, por tanto, carecen de servicios básicos como agua y energía electrica, y del interes de los líderes municipales en tiempo no eleccionario.
El rechazo no es exclusivo del municipio, según describió, pues ni el Estado ni la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en ingles) la han visitado ni colaborado con la reconstrucción tras el huracán.
En Valle Hill habitan unas 3,000 familias, en gran medida de origen dominicano.
La organización latinoamericana eligió a Flavia y otras dos familias porque enfrentaron perdidas sustanciales en comparación con los demás, conclusión que fue posible gracias a una encuesta que realizaron en la comunidad.
Luego de su llegada a la isla en octubre, el equipo tuvo jornadas de recopilar información en zonas afectadas por el fenómeno atmosferico que ya habían sido catalogadas bajo situación de pobreza. Se movilizaron a Judea, San Isidro, Los Pinos, La Granja y Villa Calma.
De 95 familias encuestadas, encontraron que las necesidades más imperantes eran el acceso a la electricidad (87%), la vivienda (79%), soluciones en techo (71%), el acceso a agua potable (65%) y la limpieza de escombros (64%).
'Es una vivienda temporera, es un nuevo comienzo, no buscamos estar a la altura de cómo se vivía antes, sino dar una solución que la familia lo mejore para volver al punto de partida antes del huracán. Por lo menos dándole valor a lo que la gente quiere, que es estar en su terreno, estar cerca de su familia. Pasaron demasiados días como para que la gente siga en un centro refugiados', explicó, por su parte, Francisco Susmel, uno de los coordinadores del proyecto.TECHO no cuenta con ayuda gubernamental, pues los materiales que utiliza son adquiridos mediante donaciones. Su llegada a Puerto Rico se dio por invitación del cantautor Rene Perez Joglar, mejor conocido como Residente.
Aunque han laborado en zonas de Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, El Salvador, Guatemala y Haití --por mencionar algunos--, en Puerto Rico se toparon con una serie de complicaciones que han atrasado, pero no detenido, las construcciones.
Entre ellos sobresale el clima cambiante de la isla, como las lluvias esporádicas y el sol repentino, además de la diversidad de elementos en los terrenos, como cemento, tierra y escombros y la falta de materiales.
No obstante, el Estado no ha sido un obstáculo.
'La ausencia del Estado es mucho más amplia [en Puerto Rico] que en muchos otros lugares. Acá nos encontramos que en contextos así, el trabajo voluntario, las organizaciones y la sociedad civil son más útiles porque la brecha tambien es más larga para todo lo que hay que hacer, no solo en vivienda', señaló Susmel.
Entre los otros hallazgos de la encuesta del conglomerado detallaron que, respecto a la vivienda, el 52% respondió que el nivel de afectación es irreparable y el 21% señaló haber perdido el techo. De esta manera, tras el huracán, el 35% permanece en su propia casa, el 32% en la casa de un familiar o amigo en la comunidad y el 14% en la casa de un familiar o amigo fuera de la comunidad.
El 11% permanece en un refugio municipal o del Estado y, en promedio, se contabilizó un mínimo de tres integrantes por hogar. Sin embargo, en algunos casos ese número ascendió a siete y nueve.
La prioridad de TECHO consiste en recaudar $2 millones para continuar la construcción de los módulos habitacionales, por lo que habilitaron la dirección emergencia.puertorico@techo.org a estos fines.
Además de Valle Hill, estarán trasladándose a unos seis municipios, como Utuado, en los que encontraron una gran concentración de casos de personas en necesidad.
La organización Techo construye viviendas a familias que lo perdieron todo en el barrio San Isidrio en Canóvanas. (Juan R. Costa / NotiCel)
La organización Techo construye viviendas a familias que lo perdieron todo en el barrio San Isidrio en Canóvanas. (Juan R. Costa / NotiCel)
La organización Techo construye viviendas a familias que lo perdieron todo en el barrio San Isidrio en Canóvanas. (Juan R. Costa / NotiCel)
La organización Techo construye viviendas a familias que lo perdieron todo en el barrio San Isidrio en Canóvanas. (Juan R. Costa / NotiCel)
La organización Techo construye viviendas a familias que lo perdieron todo en el barrio San Isidrio en Canóvanas. (Juan R. Costa / NotiCel)
La organización Techo construye viviendas a familias que lo perdieron todo en el barrio San Isidrio en Canóvanas. (Juan R. Costa / NotiCel)
La organización Techo construye viviendas a familias que lo perdieron todo en el barrio San Isidrio en Canóvanas. (Juan R. Costa / NotiCel)
La organización Techo construye viviendas a familias que lo perdieron todo en el barrio San Isidrio en Canóvanas. (Juan R. Costa / NotiCel)
La organización Techo construye viviendas a familias que lo perdieron todo en el barrio San Isidrio en Canóvanas. (Juan R. Costa / NotiCel)
La organización Techo construye viviendas a familias que lo perdieron todo en el barrio San Isidrio en Canóvanas. (Juan R. Costa / NotiCel)
Francisco Susmel y Sebastián Brum junto a un voluntario y residente de la comunidad. (Juan R. Costa / NotiCel)