El costo para el gobierno del acuerdo con la empresa (subsidiaria de New Fortress Energy), sobre la base de los cargos fijos por diez años, será de $118 millones de dólares anuales.

Finalmente se confirmó lo que ya todos sabían: será la empresa Genera PR, subsidiaria de New Fortress Energy (NFE), la que se encargará de la generación del sistema eléctrico de Puerto Rico por los próximos diez años y bajo un contrato que le reportará a la compañía $118 millones de dólares anuales.

Eso sí, antes tendrá un período de transición de 100 días, que dejará a Genera PR en condiciones de operar 17 centrales de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) y, coincidentemente, ese lapso terminará justo para afrontar su primer gran desafío: la temporada de huracanes 2024.

También ese tiempo le servirá a la empresa para evaluar los activos y contratar empleados.

El proceso, según el gobernador Pedro Pierluisi Urrutia, dista del que se estableció con el cuestionado consorcio LUMA Energy (a cargo de la transmisión y distribución), ya que "son contratos, diferentes son APP diferentes y empresas diferentes".

Para el mandatario, "Genera PR claramente tiene la capacidad para cumplir su misión", tras lo cual el director de la Autoridad para las Alianzas Público Privadas (AAPP), Fermín Fontanés, aclaró que en el caso de esta empresa "las cláusulas atadas al proceso de quiebra no están (como en LUMA Energy). Este contrato tiene punto final: cuando se apaguen las plantas, se lleve a cabo el desmantelamiento y se haga la demolición correspondiente"

El costo del contrato del que será el encargado de la generación, sobre la base de los cargos fijos y por la vida del acuerdo, diez años, es de $118 millones de dólares.

El pago a Genera PR será bajo la estructura de incentivos y penalidades: 100 millones por cada año del contrato (una cifra que disminuye a medida que las plantas vayan saliendo de servicio) y atado a los ahorros que pueda generar la compañía.

Además, habrá un pago fijo anual garantizado de 22.5 millones durante los primeros cinco años y luego ese pago se reduce de acuerdo a las plantas generatrices que se vayan a pagando.

En cuanto al pago durante el periodo de transición de 100 días, el tope máximo será de $15 millones.

A su vez, sobre los empleados de la AEE Genera PR tendrá la obligación de efectuar una oferta a los empleados de las centrales de la AEE durante los primeros 30 días del periodo de transición.

Si los funcionarios optan por pasar a la empresa y seguir como empleados de la corporación pública, tienen una garantía de dos años de trabajo para que no les rija la Reforma Laboral.

"Se van a honrar derechos de empleados, tanto por la AEE como por Genera PR, como el plan de pensión, por ejemplo", sostuvo Pierluisi Urrutia.

En el segundo proceso de privatización del sistema de generación -el primero fue en 1990 con Ecoeléctrica y AES- y tras un proceso de licitación que se extendió por dos años, Genera tendrá ahora varios objetivos que cumplir, entre ellos la transformación del sistema eléctrico, cuya flota generatriz tiene más de 40 años y el 65% de la factura está atada al combustible.

También deberá facilitar la transición a renovables de las plantas que siguen siendo de la AEE, que es dueña de los activos, recibe los fondos federales y continuará operando embalses y canales de riego, además de las instalaciones hidroeléctricas.

Asimismo, tendrá que garantizar la continuidad gerencial y de planificación a largo plazo.

Conflicto de interés y deudas de NFE

En cuanto a la posibilidad de que se produzca un conflicto de interés entre Genera PR y su matriz NFE, que ya le suple de gas natural a la central de San Juan, Fontanés explicó que "ya hay una estructura y, en el futuro, se establecerá un proceso de licitación. Se tendrá un manual para el proceso de compra bien especifico".

Agregó que "a Genera PR le conviene que venga de donde venga, el combustible baje, siempre bajo supervisión del Negociado de Energía. Deben estar enfocados en el combustible a bajo costo, porque ahí están los ahorros para nosotros y ellos".

No obstante, dijo que el contrato con la privatizadora que estará a cargo de la generación "también provee una estructura para abordar el conflicto de interés".

En cuanto a la deuda por más de $34 millones de dólares que NFE mantiene con la AEE, el gobernador dijo que el asunto está en manos del Negociado de Energía y que no es obstáculo para llevar adelante el proceso con Genera PR.

"Es una decisión del Negociado", declaró el mandatario.

Genera PR tiene una ardua tarea por delante, ya que tendrá a su cargo la operación y el mantenimiento diario de las plantas de generación, la administración de los contratos de las instalaciones y de los de combustible, así como el suministro, almacenamiento y mantenimiento del inventario.

Igualmente, será responsable del mantenimientos, reparación y reemplazo de los equipos, el manejo de los apagones por generación y del restablecimiento de la energía.

También deberá fungir como enlace con la AEE y LUMA con relación al despacho y asuntos del sistema de transmisión y distribución (T&D), así como puente con los reguladores, incluyendo el Negociado de Energía de Puerto Rico y las agencias de cumplimiento ambiental.

Genera PR manejará los fondos federales para la flota generatriz y asistirá a la AEE en el cumplimiento de cualquier obligación bajo las leyes aplicables.

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