Log In


Reset Password
SAN JUAN WEATHER
Vida

Vía adopción: Padre de cuatro, de cantazo

Hiram Carlo Rivera López logró su sueño de ser padre en medio de un proceso hermoso que relató a NotiCel con lágrimas.

En medio de la pandemia, Hiram Carlo Rivera (derecha) se convirtió en padre.
Foto: Luis López / Especial para NotiCel

Fue por uno y salió con cuatro.

Hiram Carlo Rivera López solía visitar hogares de niños y mujeres maltratadas como voluntario.

Y hacía un tiempo había despertado en él un deseo intenso de convertirse en padre.

“Fue una historia totalmente improvisada. Nada fue buscado, nada fue planificado”, relató el hombre, abogado de profesión, en entrevista con NotiCel en el marco de la celebración del Mes de la Adopción.

“Mi pareja y yo queríamos tener un hijo. Un hijo, uno. Y comenzamos a auscultar las alternativas para poder tener un viente subrogado y tener ese bebé que tanto queríamos”, agregó.

Fue durante una de esas visitas a hogares de niños que se encontró con dos varoncitos que le llamaron la atención y preguntó si eran candidatos a adopción. Le dijeron que sí, que en ese hogar todos estarían en algún momento disponibles para adopción.

“De repente miro al lado y habían dos niñitas que eran idénticas a ellos y pregunté si eran dos hermanos y me dijeron no, que eran cuatro, pero que las niñas ya estaban en un proceso de ser ubicadas en un hogar”, narró.

De inmediato, comenzó junto a su pareja el proceso de solicitud para certificarse como hogar sustituto, hasta que llegó la llamada que le cambió la vida para siempre.

“Me llamó la trabajadora social, que iban a someter mi solicitud para el proceso de pareo pero que el Departamento de la Familia tenía una inclinación a no separar los hermanos. Inicialmente te confieso que lloré mucho. Me dio mucho sentimiento, mucho temor. Me dio miedo insistir en que fueran dos y entonces me cerraran las puertas. Pero llamé a mi pareja y me dijo ‘vamos a hacerlo’, así que rápido llamé a mis hermanas para consultarles, sabiendo que ellas serían mi apoyo”, sostuvo.

Emocionado y con lágrimas sobre sus mejillas, recordó el momento en que sus hermanas le apoyaron incondicionalmente y le recordaron que todo se puede, y que ellos también fueron cuatro hermanos.

“Cierro los ojos y me emociono. Somos cuatro hermanos y nos criaron con mucho sacrificio”, expresó.

Ya no había vuelta atrás. La decisión estaba tomada y comenzó la transformación de un hogar de adultos a uno apropiado para la crianza segura de niños- "kids friendly".

Los recibió en su casa un 6 de agosto en calidad de hogar sustituto, mientras concluía el proceso de privación de patria potestad, un paso en el que se certifica legalmente la culminación definitiva del vínculo con la familia biológica. Una vez concluido, pasó a ser un hogar pre-adoptivo, para lo cual firmó en diciembre un contrato con el Departamento de la Familia.

“Ya en enero comienza el proceso más formal, pero entre los terremotos y la pandemia, el proceso se dio un poco más lento de lo normal", contó.

Los pequeños tienen 2, 3, 4 y 5 años.
Foto: Luis López / Especial para NotiCel

El 26 de octubre de 2020 a las 3:05pm

El proceso de un año y tres meses vio su momento más feliz el pasado lunes, 26 de octubre, a las 3:05pm. En ese momento sus hijos se convirtieron en hijos para siempre.

“Mis padres y mis hermanas estaban aquí. La juez quiso verlos y con mucha humildad ellos se presentaron a la juez, no en una sala de tribunal, por cámara, virtual”, relató.

En el proceso de adopción, el licenciado experimentó una pérdida significativa de ingresos, pero nunca perdió la esperanza. “Yo vengo de un campo en Villalba. Vengo de una familia en que si faltaba algo, mi papá sacaba un ñame y mataba una gallina, donde no importaba qué, la comida nunca faltó”, dijo.

Un padre nuevo en medio de la pandemia

Sus hijos tienen 2, 3, 4 y 5 años. Literalmente se llevan meses. Y en tiempos de pandemia, la lucha con su educación de escuela maternal, pre pre kinder, pre kinder y kinder, ha sido “hermosamente caótica”, dijo, mientras tanto él como su pareja deben salir a trabajar. Nada, absolutamente nada, ha quebrado su fe.

“Esto ha sido una metamorfosis en mi vida. Siempre he sido una persona bien familiar. Dejar de enfocarme en mí para que otro sea tu prioridad. Mi vida dejó de ser mía para ser de ellos. Es duro pero es tan satisfactorio. No hay nada más lindo que escuchar que te pidan la bendición, que te digan que te quieren, que les dé un beso antes de irse a dormir”, dijo, mientras uno de sus hijos le interrumpía incesantemente. “Papá, quiero jugo. Quiero jugo, papá. Papá!”, insistía.

El hombre y su pareja tuvieron una conversación extensa antes de aceptar ser entrevistados para ese diario digital. Y con razón. La privacidad siempre prima. El celo y la protección, sobretodo cuando se ha luchado tanto por tener hijos, es importante.

“Yo soy bien reservado y cuando discutía la posibilidad de esta entrevista con mi pareja le dije, voy a hacerlo. Y lo hago porque existen 3,500 niños en este momento sin adoptar. Y la gente tiene que entender que esto, más que un proceso, es una doctrina de amor. Tantos niños con necesidad de amor. Mi intención es que la gente se anime y que la adopción se convierta en un proceso accesible a todos”, expresó.

Egresada de la Universidad de Puerto Rico. Periodista con 23 años de experiencia en los medios de comunicación. Mamá de Manu, portavoz de la adopción de niños grandes y creadora de #primerizayqué